Prepararé café.

Podríais cocinar un romance, a fuego lento ya sabes.Poco a poco, como el caldo de mi abuela María, pacientes, sin precipitaros pero valientes, indiferentes de los riesgos que conlleva jugar con los fogones, arriesgando con los ingredientes, y por qué no, con la sal, ¿No crees? Glasea y carameliza todos los pequeños instantes, y guardároslos en un tuperweare, porque son sólo vuestros. ¿Precalentar el horno? Dios no te enteras,hazme caso…Se fiel a lo que sientes, se fiel a lo que piensas, se fiel a tus manos y pies, y sobretodo, se fiel a lo que quieres no a lo que crees que necesitas….No hagas caso a los sinsetidos, aunque desaparezcan siempre llegarán nuevos, y no puedes utilizar ningún utensilio de tu cocina para defenderte de ellos, ni siquiera las inmortales cucharas de madera que decoran tu encimera.