Ella sabe quien es, pero a veces le aterra conocerse demasiado y que no le guste lo que encuentre. Sueña en una ciudad dónde una imagen lo es todo y ojalá un sentimiento lo fuera más. Le apasiona el café en vaso de sidra con mucho azúcar y espuma ligeramente espolvoreada con canela. El mundo le hizo conformista, aunque es un punto que tiene pendiente por arreglar. En verano duerme desnuda y en invierno con ochocientas mantas, siempre con la boca abierta y en la misma posición.
¿Quieres saber más? Cojeme de la mano, quiero que lo sepas todo asique tenemos para rato.
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